PERSONAJE 5E

NENTH LUZ CREPUSCULAR

PERSONAJE 5E

NENTH LUZ CREPUSCULAR

La historia de Nenth Luz Crepuscular

Nenth es un hije de la victoria. Así es como llaman en Última Reducto a la primera generación de nacidos en Bastión tras la victoria contra Ocaso y sus huestes.

Nenth fue formade en historia y religión por su madre, Laya, clériga del Eleanat, e instruide en combate y liderazgo por su padre, Miyai. Pero fue su tio Benya, un humilde panadero de las cocinas de los barracones, quien, momentos antes de su muerte, le enseñó lo más importante: el equilibrio entre la responsabilidad y el poder.

Nenth sobresalió durante su etapa en el servicio militar. Paladine del Eleanat y sargente. Pero todo cambió cuando, para salvar la vida de su pelotón, tuvo que romper su juramento.

Se vio obligade a absorber una esencia de Ocaso en su interior. Cuando estaba a punto de colapsar, su Hoja Lunar se sacrificó por elle y absorbió una parte de la esencia. Nenth perdió una amiga a cambio de un poderoso y peligroso Patrón. El Eleanat castigó su decisión, pero el Noctimor le abrió sus puertas.

La historia de Nenth Luz Crepuscular

Nenth es un hije de la victoria. Así es como llaman en Última Reducto a la primera generación de nacidos en Bastión tras la victoria contra Ocaso y sus huestes.

Nenth fue formade en historia y religión por su madre, Laya, clériga del Eleanat, e instruide en combate y liderazgo por su padre, Miyai. Pero fue su tio Benya, un humilde panadero de las cocinas de los barracones, quien, momentos antes de su muerte, le enseñó lo más importante: el equilibrio entre la responsabilidad y el poder.

Nenth sobresalió durante su etapa en el servicio militar. Paladine del Eleanat y sargente. Pero todo cambió cuando, para salvar la vida de su pelotón, tuvo que romper su juramento.

Se vio obligade a absorber una esencia de Ocaso en su interior. Cuando estaba a punto de colapsar, su Hoja Lunar se sacrificó por elle y absorbió una parte de la esencia. Nenth perdió una amiga a cambio de un poderoso y peligroso Patrón. El Eleanat castigó su decisión, pero el Noctimor le abrió sus puertas.